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Desde finales del año pasado Chile vive en una constante agitación social y movilización por parte de su ciudadanía, que este año se vio interrumpida en su desarrollo por las restricciones sanitarias que impuso la pandemia del COVID-19, pero que a medida que pasan los meses está volviendo a resurgir. 

En días pasados nuevamente se han vivido jornadas de protesta y conmemoración de las movilizaciones de hace un año, todo esto en el marco de la próxima cita que tienen chilenos y chilenas en las urnas para votar el plebiscito este 25 de octubre que, entre otras, marcará un antes y un después en la historia del retorno a la democracia de ese país austral. Recordemos que la actual constitución política que lo rige data de la época de la dictadura cívico-militar del genocida Augusto Pinochet.

Asimismo, será la punta de lanza para una serie de reformas que la ciudadanía chilena está exigiendo no sólo en materia política sino también económica y social.

Las movilizaciones y protestas de días pasados, como las de finales de 2019, no han estado exentas de actos violentos y de represión estatal. El 3 de octubre se denunció el intento de homicidio de un carabinero contra un joven de 17 años que estaba en las jornadas de protesta de ese día. En un video que se hizo viral se evidencia cómo el uniformado lanza por un puente a un río al menor de edad. Por otra parte, recientemente se ha hecho público que un joven ha sido asesinado en el marco de las movilizaciones del pasado 18 de octubre y todo parece indicar que también hay carabineros involucrados.

Otro acto violento que se registró el fin de semana fue la quema de dos iglesias católicas en Santiago de Chile, al parecer por manifestantes.

Por lo anterior, desde la Red Latinoamericana y del Caribe para la Democracia (Redlad):

• Instamos al gobierno de Chile, en cabeza del presidente Sebastián Piñera, y a las autoridades de Carabineros a respetar el derecho a la protesta pacífica y a la movilización ciudadana.
• Exhortamos al gobierno chileno y los órganos electorales a proteger la jornada cívica y democrática que tendrá lugar el 25 de octubre. Se deben generar todas las garantías para que las personas acudan a las urnas.
• Solicitamos que durante las reformas políticas, sociales y económicas que empezarán a partir del plebiscito se respete y garantice el derecho a la autonomía y libre autodeterminación de los pueblos indígenas de Chile. 
• Instamos a las organizaciones de la sociedad civil y a la ciudadanía en general a rechazar y repudiar todo acto de violencia, sin importar su origen o posible justificación.

Como sociedad civil defendemos y promovemos el derecho a la protesta y la movilización, que deben ser garantizadas plenamente por el gobierno. Sin embargo, también creemos que en una democracia la libertad de culto y creencias debe ser protegida. Dichos actos de violencia nos ponen en peligro a todos y todas y profundizan las brechas entre la ciudadanía.

Entendemos que haya críticas a algunas instituciones religiosas, pero no podemos usar la violencia como instrumento para tramitarlas.